¿A quién no le ha desesperado su madre en algún momento? A veces son adorables, a veces exageran sin límite. A veces las extrañamos, a veces queremos hacerles una llave grecorromana al cuello. Cada quien tiene una relación diferente con su propia madre, o mejor o peor que mi relación con la mía. Pero a veces creo que me tocó una madre especial.
Bueno, la historia es simple. Dejé todo y a todos en Perú y me fui de viaje sin trabajo pero con ahorros y con los rezos de mi madre. Este blog es una mezcla de sarcasmo inapropiado y photoshop cada vez menos exagerado. Y la verdad nunca he hecho hitchhike, ni lo haría. Después hay que conversar... Prefiero caminar cantando.