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En verano, siempre en verano...

Las mejores ocurrencias nos vienen siempre en un baño o al frente de la computadora después de las 2am. Afortunadamente es la segunda...

Definitivamente el mejor momento para enamorarse es en verano, y he llegado a ésta conclusión por varias razones.



  1. Uno está siempre más relajado en verano que en cualquier otra estación:

    La única preocupación es no despilfarrar el sueldo antes de lo debido. Si son lo suficientemente suertudos, trabajadores, ahorradores o (en el defecto de ésas tres importantísimas características) creyentes, un buen presupuesto puede variar entre los 40 o 50 soles diarios. No está mál. Alcanza para un arroz con huevo de desayuno, 6 chelas y un taco en la noche.

    Obviamente estamos hablando de pasar el verano en la playa. Habría que ser un demente para almorzar 6 chelas y cenar un taco en la ciudad.
  2. La pregunta ¿qué día es? no tiene validez:

    Si uno tiene la suerte de poder ir a la playa por más de 4 días, realmente no importa qué día es allá. Juerga? Hay. Gente? Hay. Fiestas? Hay. Cerveza? Cuando no haya, es momento de regresar.

    Si vas a la playa por el día, no vale. Si vas un día y regresas al siguiente, tampoco cuenta, porque técnicamente no has pasado un día entero allá. Si vas un viernes (por ejemplo) y regresas el domingo, tan sólo tendrás un día para decir "hoy amanezco, desayuno, me baño, tomo, me baño, tomo, me baño, tomo, como, me baño, tomo, tomo, tomo, bailo y me acuesto en la playa". Pero sólo es un día.
  3. Hay más tiempo para ponerle atención a cosas más simples, como el amor:

    Tienes plata (y si no, no te enamores), tiempo, amigos, fiestas.... Da más gusto pensar en las nimiedades de la vida, las cosas que la gente usualmente ignora. Pueden disfrutar un buen café caliente y dulcísimo, una ducha nocturna acompañados de un vinito, un buen grupo de música, una película hasta altas horas de la madrugada. Y si tienes alguien con quien compartir todo éso (especialmente la ducha), necesitas algo más? No. Y si sí, no es verano pé!
Claro que existe la contraparte... Uno se enamora en verano, y como tiene tiempo de todo, es detallista, cariñoso, caballero, relajado. Termina el verano todo se va a la merde con el estudio y/o trabajo. Pero en ese caso, volvamos al punto 1. Como dicen, lo que no fue en tu año, no te hace daño. O mejor dicho, si ya no es verano, por el ... .

PD: Si desean probar la ducha con un vinito, al final de ésta publicación les dejo unas canciones que pueden intentar. Si les agradan las canciones, tengo petabytes de esa música. Me gustaría saber cómo les fue. Si prueban la ducha con alguien más, ahórrense los detalles.

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